Una Geisha se dedicaba a entretener tanto a los hombres como a las mujeres en fiestas, reuniones o banquetes pero, ¿Cómo es la vida de una Geisha? Hoy en nuestro blog os lo contamos todo al detalle.

¿QUÉ ES UNA GEISHA?

Una Geisha, Geiko en la región de Kyoto, es una artista tradicional japonesa que se dedicaba a entretener al público, tanto masculino como femenino, en fiestas, reuniones o banquetes a través de artes tradiconales japonesas, que podían ser la música, el baile o la narración. Las Maiko son aprendices de Geisha.

Las Geishas aún estudian: El shamisen, el shakuhachi (flauta de bambú), el taiko (tambor), canciones tradicionales, baile japonés clásico, Sadō (ceremonia japonesa del té), Ikebana (arreglos florales), literatura, poesía y teatro.

VIDA DE UNA GEISHA

Hoy en día, aunque pocas chicas quieren convenirse en una de ellas debido a la vida tan sacrificada que llevarán hasta dominar la profesión, sigue habiendo quien se interesa por formarse como geisha. Hay chicas que tras la universidad no encuentran trabajo y deciden dedicarse a ello, u otras destacan en algún tipo de arte, como la música o la danza, y deciden hacer de ellas su propio trabajo.

Las Geishas empezaban su entrenamiento con una edad temprana. Algunas antiguamente eran llevadas  de niñas a las casas de Geishas que su etapa de trabajo se la conoce como shikomi, donde hacían tareas de limpieza y debían obedecer todo tipo de órdenes. En la actualidad, trabaja en tareas hogareñas, y se le impide toda comunicación con su familia por uno o dos meses.

El trabajo de estas y sus aprendices, era desempeñado en unos barrios conocidos como hanamachi, además, hacen su vida en casas comunitarias llamadas okiya.

Durante la niñez, las Geishas solían trabajar de criadas o asistentes de aquellas que ya han adquirido cierta experiencia. Se encargan de la limpieza de la casa, la preparación de las ceremonias, los utensilios que se iban a usar o vestir a las geiko de mayor rango, ayudaban con la preparación del kimono y de las ceremonias del té, entre otras actividades.

A continuación, como minarai, es decir, aprendices de Geisha (Maiko), donde el primer mes debía ser de observación, en los banquetes ozashiki y celebraciones.  Tras su ceremonia (omisedashi), en la que estas atienden por primera vez una tienda e  intercambian sake con varias personas, eran emparejadas con una one-san, que se convierte en su mentora y le enseña durante su aprendizaje en el karyukai, pretendiendo que esta consiga ser famosa, talentosa y además, respetada.

Tras su primer mes, las minarai se convierten en Maiko “junior”, y comienzan a pintarse la parte del labio inferior, a pintarse ambos. Este aprendizaje suele prolongarse desde los 15 años hasta los 20.

Durante estos 5, las Maiko reciben una formación centrada en la danza tradicional, en los instrumentos musicales japoneses, además del protocolo y el arte de la comunicación. También hay que decir, que durante este periodo, no perciben ningún tipo de sueldo, pero el lugar donde viven, la comida, los arreglos peinados y trajes, no tienen que ser pagados por ellas.

Las Maiko también ejercen actividades fuera de las casas de té, como participar en las celebraciones de setsubun, donde realizan rituales y también ahuyentan a los demonios lanzando habichuelas.

Estas suelen arreglar por si mismas su pelo, aunque acuden al menos una vez a la semana a especialistas en este campo para su arreglo. Una manera de decorar su cabello era el kandashi, horquillas que habían sido dadas por sus “hermanas mayores”. Cuando hablamos del maquillaje, estas se dejan la zona trasera del cuello al descubierto, ya que así se produce un efecto de longitud que en el país nipón es considerado como un símbolo de belleza.

Tras finalizar la preparación, las Maiko se dirigen hacia otras okiyas y casas del vecindario para realizar saludos en compañía de sus one-san, que se dedican a controlar y corregir los errores que puedan cometer, sobre todo en el comportamiento o en la ropa.

A los 20, cuando alcanzan lo que se considera como la “mayoría de edad”, las Maiko pasan a celebrar una ceremonia llamada Erikae, en el que el cuello del Kimono que suelen llevar, pasa de un color rojo, al blanco. Asisten con un Kimono negro especial llamado kuromontsuki y un estilo de pelo llamado sakkou. Aquí es cuando pasan a convertirse en Geishas.

Tras ello, por fin comienzan a percibir salario, y comienzan a tener que encargarse por ellas mismas de los costes de todo, ya que siendo Maiko, no tenían que hacerlo.

A partir de que son Geishas, la decoración, estilo de kimono y maquillaje son distintos.  El peinado, por ejemplo, formado por una peluca llamada shimada. Empiezan a cuidar a sus hermanas pequeñas tal y como hicieron con ellas cuando eran más jóvenes.

Levan una menor decoración que cuando eran Maikos, además su calzado son las geta, mientras que siendo Maiko usaban los llamados okobo, que son una especie de zapatos con plataformas de madera.

Comienzan a maquillase sin estar totalmente vestidas para no manchar el Kimono, pero tardan bastante (unas dos horas) ya que esto debe llevar una rigurosa preparación. En el peinado también se toman mucho tiempo, ya que deben estar perfectas, por eso hemos de considerar todo el proceso como un tipo de arte.

Siguen aprendiendo durante toda su vida, cultivando las artes, la estética o la música. Son reconocidas no solo por sus bailes o sus artes con la música, también son hábiles en los juegos para entretener a los clientes, por ejemplo, el de coger rápido y habilidosamente piedras con los palillos.

Hoy os hemos enseñado un poco más sobre qué son las Geishas y hemos tocado el tema sobre lo referente a su vida. ¿Os ha gustado? ¿Sabíais que ellas se dedicaban a este tipo de artes japonesas?

Fuente de las imágenes: nilaayuwidiastuti, find-travel, yoshinoya-geigi, japantimes, vimeo, huffingtonpost.